Las primeras expresiones de la movilización frente al Congreso se replegaron casi en su totalidad a la avenida Rivadavia, cuyos edificios ofrecen la primera sombra de la tarde.
Allí, pero también desparramados en otras zonas de la Plaza del Congreso, aparecen los primeros manifestantes “de a pie” que, sin afiliaciones partidarias ni vínculos con las organizaciones gremiales o sociales que convocan, se funden con la protesta por los haberes de los jubilados..